Frank Underwood (encarnado por un magistral Kevin Spacey, antes de que el #metoo le defenestrara) es un (ambiciosísimo y manipulador) congresista demócrata que sueña con llegar a ser Secretario de Estado, y cómo no, Presidente. Y Frank no está dispuesto a que nada se le ponga por delante. Para ello va a contar con el más fiel de los jefes de equipo, Doug Stamper, la ayuda circunstancial de la periodista Zoe Barnes y el apoyo incondicional de su mujer Claire (elegantísima Robin Wright sin- Penn).
Una serie de culto, con detalles únicos. Fue una de las primeras producciónes propias de Netflix.
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