¿Os gusta el cine musical? Pero el de verdad, ese en el que los personajes no saben que están cantando (no sé dónde escuché esa definición el otro día, y me encantó). Pues hoy os voy a hablar de un musical muy poco conocido, una de esas “curiosidades” que de vez en cuando me gusta mostraros.
Se trata de una película llamada Los Últimos Cinco Años. Está basada en una obra de Broadway, ganadora del Tony, con el mismo título (The Last Five Years), y que tiene dos únicos actores: Anna Kendrick y Jeremy Jordan.
A Anna Kendrick la conocimos como la amiga antipática de Bella Swan en la saga Crepúsculo. La verdad es que la chica tiene cara de borde, aunque no sabemos si en realidad lo es. Yo la he visto en un montón de entrevistas de programas americanos, (esos que Pablo Motos mataría por conseguir llegar a la suela del zapato), y siempre me ha parecido una chica muy simpática, a pesar de todo.
Después de Crepúsculo llegó Up in the Air, una película con George Clooney, por la que fue nominada al Oscar, y un montón de títulos más. Pero por lo que, de verdad, conocemos a esta actriz es por la trilogía de taquillazos de Pitch Perfect (Dando la Nota). Qué buena y qué divertida la primera de las películas, donde descubrimos que Anna Kendrick sabía cantar. Y de qué manera.
Con Jeremy Jordan pasó justo lo contrario. Todos el mundo sabe que Jeremy canta. Y cómo canta. Es una de mis voces favoritas, sin lugar a dudas. Empezó en teatro, convirtiéndose en uno de los nombres imprescindibles del panorama de Broadway, estando incluso nominado al Tony por su papel protagonista en Newsies.
Desde entonces ha encadenado series y películas, prácticamente todas musicales (Smash, Las Chicas del Coro, o esta misma), excepto Supergirl, donde interpreta al amigo friki. Me sorprende que con la de actores conocidos por su faceta musical que protagonizan las series del Arrowverso, en particular, Flash y Supergirl, no hayan hecho más episodios musicales. Todo se andará, supongo.
Kendrick y Jordan son Cathy y Jamie. Ella actriz, él escritor. Y están muy enamorados. Pero mientras ella va de casting en casting, y de un “ya le llamaremos” a otro, él va a ver cómo su libro no solo se publica, si no que se convierte en un best seller. Poco a poco la relación se va a resentir. ¿Es porqué ella siente celos y no puede soportar el éxito de Jamie? ¿O es porque él sólo se preocupa de sí mismo, y no le importan los problemas de Cathy? ¿O quizás un poco de ambos?
A nosotros nos va a tocar decidir, puesto que vamos a ver los dos lados de la historia, cantada por los dos, de una manera bastante curiosa. La de ella desde el final, la de él desde el principio; lógicamente habrá ciertos puntos de encuentro.
No, no es un error tipográfico. En el párrafo anterior os digo que la historia está cantada y no contada, por cada uno de sus protagonistas, y es que es esta una película cien por cien musical. Debe de haber unas cincuenta palabras sueltas a lo largo de todo el metraje, que no sean cantadas. Así que si no os gustan los musicales, mal vamos.
Podéis comprarla en DVD y verla en Filmin.
Publicado en Tribuna de Ávila