La próxima semana llega el día grande de los estadounidenses. El día de la Independencia. El 4 de julio. Generalmente se celebra con grandes fiestas familiares, con barbacoas, y fuegos artificiales. Este año, la mitad de los americanos estarán en confinamiento, y la otra mitad manifestándose en nombre del movimiento #BlackLivesMatter, que ha sacado a la gente a la calle, la mayoría con mascarillas y distancia social, para protestar por las injustificadas muertes de ciudadanos negros a manos de la policía. La gota que ha colmado el vaso ha sido la de George Floyd, después de que un policía lo mantuviera retenido con su rodilla en el cuello durante nueve minutos, mientras tres compañeros miraban. Y de que todo fuera grabado y publicado en redes sociales. Por cierto, los policías no fueron detenidos hasta que las autoridades estatales no pudieron sostener su postura por más tiempo.
Hay un pequeñísimo porcentaje de personas en el mundo que puede permitirse ir a ver una obra de Broadway. Esto es un hecho. No solo porque hay que viajar a New York, sino porque la mayoría de las obras son sold out durante meses, y los precios de las entradas tampoco son, precisamente, asequibles. Así, el noventa y nueve por ciento de la población mundial, se queda sin ver obras que han que forman parte de lo mejor de la historia de la cultura popular. No. La adaptación de Cats al cine no cuenta, desde ningún punto de vista.
Uno de los mayores éxitos de Broadway de las últimas décadas, ha sido Hamilton, la historia de uno de los padres fundadores de los Estados Unidos. Con letras, música y guion de Lin-Manuel Miranda, inspirada en Alexander Hamilton la biografía de 2004 del historiador Ron Cherno.
La banda sonora es una mezcla de hip-hop, jazz y típicos números musicales de Broadway. Y lo más llamativo es que los personajes históricos retratados, (Jefferson, Washington, Madison, Burr, etc) están interpretados por actores negros, latinos y asiáticos. La obra recibió once premios Tony, el Pulitzer al mejor drama, un Grammy y siete premios Drama Desk. Ahí es nada.
Alguien tuvo la feliz idea de grabar la obra, con la idea de exhibirla en cines, y que todos pudiéramos verla, aunque no sea lo mismo que verla en el patio de butacas del teatro. Pero entonces llegó la pandemia, y el confinamiento. Y otra cabeza, bien pensante, decidió adelantar el estreno, y pasarlo, además, a una de las plataformas de streaming, para que no tengamos que salir de casa para verlo. No en vano, a este paso, no sabemos cuánto nos queda de “nueva normalidad”, antes de que nos vuelvan a mandar a casa, castigados por no ponernos la mascarilla y no guardar la distancia recomendada.
Pero a lo que iba: el próximo día tres, en víspera del cuatro de julio, en Disney+ estará disponible para todos los públicos (han eliminados los tacos que se decían en la obra, para que también puedan verla los niños americanos), y con el cast original: Lin-Manuel Miranda, Leslie Odom Jr., Daveed Diggs, Phillipa Soo, Chris Jackson, Anthony Ramos, Renée Elise Goldsberry y Jonathan Groff.
Yo ya tengo preparadas las palomitas y los nachos, para verla a la manera más americana posible.
Y si os quedáis con ganas de más, o si queréis ir abriendo boca, hay un par de obras de Broadway disponibles en nuestras plataformas, que también son interesantes. Muy americanas las dos, para poder aprovechar la ambientación.
Una de ellas está incluida en una lista que se ha elaborado por los activistas del mismo movimiento del que os hablaba antes, #BLM, para que los americanos blancos aprendan a no ser racistas. Es una labor difícil, pero interesante. La obra se llama American Son, y trata de la angustia y frustración de unos padres cuyo hijo ha desaparecido. La particularidad de estos padres es que la madre es negra, y, a pesar de tratarse de un matrimonio acomodado, la policía no trata de la misma manera el caso, que si se tratara de un chico blanco. Está protagonizada por Kerry Washington, Steven Pasquale, Jeremy Jordan y Eugene Lee. La tenéis en Netflix.
La otra es mucho más alegre, pero también con trasfondo social. Newsies retrata la huelga de los repartidores de periódicos de Nueva York de 1899. También muy americano. La obra está basada en La Pandilla, la película de Disney de 1992. También fue grabada de una representación en directo, así que conserva el espíritu del teatro. Ganó dos premios Tony y otros dos Drama Desk. La tenéis, lógicamente, en Disney+. Está protagonizada (también) por Jeremy Jordan, junto a Kara Lindsay, Ben Fankhauser, y Andrew Keenan-Bolger.
Publicado en Tribuna de Ávila.