Libros en vacaciones

Siguiendo con las recomendaciones de ocio para estos días, hoy os voy a hablar de algunos libros, para leer en vacaciones.

Desde que me dedico a esto de escribir sobre series, los que me conocen de más tiempo me acusan (y no digo yo que no tengan razón) de que tengo un poco abandonado eso de los libros. Y por eso hoy os voy a recomendar algunos libros, para que leáis durante las vacaciones, o para que pongáis en vuestra carta a los Reyes Magos.

Voy a empezar por uno de los dioses de la literatura de fantasía, que nos fue arrebatado demasiado pronto por el alzheimer. Sir Terry Pratchett, al que adoro. No quería yo hablar de series, pero, en estos momentos se prepara una con Michael SheenDavid Tennant y Jon Hamm, basada en Buenos Presagios, la novela que escribió “a pachas” con Neil Gaiman, el pirado de American Gods.

Dicen que la tierra es plana y se aguanta a lomos de cuatro elefantes que están encima del caparazón de una tortuga…

Hace unos años cayó en mis manos un libro con una portada muy colorida titulado Tiempos interesantes, de un tal Terry Pratchett, y yo que, en aquellos días, leía hasta la parte de atrás de las cajas de cereales, quise saber de qué iba la cosa.

Las primeras páginas hablaban de cosas muy raras. “¿Qué es esto?”, pensé. ¿Un planeta plano, sobre cuatro elefantes y estos sobre una tortuga navegando por el espacio? ¿Una Universidad de la Magia, más parecida a las universidades inglesas de más rancio abolengo? ¿Un gorila bibliotecario? ¿Enanos, trolls, brujas, vampiros, hombres lobo, zombis, magos?

Terry Pratchett tenía una ácida visión de la Inglaterra más típica del siglo XX pero con un punto de los “Picapiedra”. Me explico: ¿Os acordais de cómo usaban todo tipo de animales prehistóricos adaptados a la vida moderna (de los años 60)? Pues aquí pasa lo mismo pero con toda la nómina de personajes fantásticos. Y por supuesto cargado de humor inglés.

Resultó que el libro que me había leído era como el decimosexto de una larguísima colección llamada “El Mundodisco”. Consta de más de cuarenta títulos, (no todos traducidos al castellano), y, si no los conocéis, estáis tardando. Corred, insensatos.

Y siguiendo por esta senda, si os gustan las historias de fantasía, si habéis viajado de la Tierra Media a Narnia, si os gustaría ser un Shannara o si alguna vez habéis jugado a Dungeons and Dragons, os voy a hablar de un libro desconocido, escrito (y autoeditado) por un autor desconocido, que, sin embargo, está sorprendiendo a los fans de la literatura épica de fantasía. El libro se llama Los Once de Graiport y su autor Fernando Calderón.

La novela tiene más de setecientas páginas, y viaja con una pandilla de niños escoceses de los años ochenta (seguramente por eso me siento tan identificada), desde el pueblo costero donde pasan las vacaciones hasta un mundo poblado de demonios, animales parlantes, hadas, vampiros, elfos, duendes, dragones, grifos, centauros, trasgos, palacios encantados, espadas mágicas, y en el que ellos tendrán la llave de la salvación. Y todo salpicado de referencias de la cultura pop de los años ochenta.

Como curiosidad, os diré que el autor ha puesto en marcha un reto, por el que se ha propuesto traducir el libro al inglés si consigue vender mil quinientos ejemplares.

Y para terminar con las recomendaciones literarias por hoy os voy a hablar de una saga que no se ha traducido al español, pero que podéis encontrar a la venta en inglés en Internet, y que yo siempre he llamado el Hogwarts de las espías: The Gallagher Girls, de Ally Carter.

La Academía Gallagher para jóvenes extraordinarias, podría pasar por ser un exclusivo colegio privado femenino. Lo que nadie (o prácticamente nadie) sabe es que, en realidad, es la escuela donde estudian las futuras agentes de la CIA, el MI6, la NSA y resto de agencias de inteligencia repartidas por el planeta. Es uno de los secretos mejor guardados del mundo.

La escuela fue fundada por Gillian Gallagher, una joven que frustró un atentado contra Abraham Lincoln, pero a la que nunca tomaron demasiado en serio, por eso de ser joven y además mujer. Así, que cuando sus padres murieron, ella convirtió su mansión en un lugar donde las mujeres jóvenes e inteligentes pudieran prepararse para ser lo que ellas quisieran.

Cammie Morgan podría ser Harry Potter. Huérfana sólo de padre, (su madre, Rachel Morgan, es la directora del colegio, una Dumbledore respetada y admirada por todos), se ve envuelta, sin apenas buscarlo en una gran cantidad de aventuras, en las que va a ver en peligro su vida y la de sus amigos, y de las que saldrá siempre con más o menos gracia.

Cammie tiene dos amigas. Rebecca Bex Baxter, nuestra Ron Weasley particular, hija de dos agentes del MI6, ha nacido, crecido y vivido toda su vida entre espías. Liz Sutton es una niña normal. Sus padres son muggles, quiero decir, no tienen ni idea de qué está estudiando su hija, y sólo saben que fue escogida para estudiar en un colegio tan exclusivo por su extraordinaria inteligencia. Y es tan estudiosa como Hermione Granger.

Para romper el triángulo potteriano (perdón por el palabro) va a llegar al colegio Macey McHenry,  la hija del Senador McHenry y descendiente directa de la mismísima Gillian Gallagher.

Como es de esperar, Cammie y sus amigas, van a salvar al mundo, mientras, como  buenas adolescentes, se preocupan por su pelo, hablan de chicos, se rebelan contra los adultos y descubren el amor.

Publicado en comicconspain.com