Vampire Academy, Sangre Azul y Bendecida por la sombra son los tres primeros libros de una nueva saga de vampiros adolescentes. Está pidiendo a gritos la adaptación cinematográfica.
Que los vampiros están de moda, eso es algo que nadie puede negar. La familia Cullen, los hermanos Estefan o Bill Compton, conviven con el Conde Drácula y Lestat de Lioncourt en las estanterías de nuestras casas y de las tiendas de libros de todo el mundo.
La saga Vampire Academy nos presenta una nueva hornada de adolescentes, que vive en la Academia San Valdimir (que es una especie de Hogwarts para vampiros). Aquí la mitología se hace más complicada, siguiendo las leyendas vampíricas de la Europa del Este: Hay dos tipos de vampiros, los buenos son los Moroi. Son seres que beben sangre, pero también comen y beben (algunos demasiado), tienen hijos, soportan la luz del sol (aunque les molesta) y van a misa los domingos.
Los vampiros malos son los Strigoi. Estos son los vampiros que todos conocemos, los que sólo mueren si les clavan una estaca de plata en el corazón, les cortan la cabeza o les queman. Los que no soportan la luz del sol ni los lugares sagrados. Esos que han perdido toda la humanidad que tenían cuando eran morois, humanos o Dhampir.
Los Dhampir son seres mestizos. Hijos de moroi y humanos u otros dhampir, tienen los sentidos muy desarrollados y su única misión es la de ser Guardianes, protectores de los moroi.
Rose Hathaway es una joven dhampir atractiva y rebelde, unida por un mágico y misterioso lazo a su mejor amiga, la princesa Dragomir de la que algún día será su Guardián. Lissa Dragomir es la última de una importante familia de la nobleza moroi, pero también es una chica de diecisiete años, que vive en un internado mixto. Los problemas de la juventud actual se cruza con las intrigas palaciegas más propias de la época de los zares. Chicos, alcohol, exámenes, sexo, política, conspiraciones, asesinatos, y muchas aventuras.
La saga consta de seis libros, de los que hasta ahora se han publicado sólo tres en España, y aunque su autora, Richelle Mead no ganará el Nobel de Literatura, la historia engancha porque cuenta con buenos muy buenos, malos muy malos, romance, aventura y todos los ingredientes típicos de estas novelas, cruce de Agatha Christie, Enyd Blyton y Barbara Cartland.
Lectura fácil y entretenida, que deja con ganas de más.
