Hay ocasiones en las que me cuesta elegir el tema del post semanal. Y es que ha llegado un momento, en el que no escribo sobre las series que veo, sino que veo series para escribir sobre ellas. Sin embargo, otras semanas, el tema casi sale solo.
El otro día un buen amigo me comentaba la cantidad de cantantes que nos encontramos como estrellas invitadas, o personajes más o menos regulares en las series que vemos. Y justo al día siguiente, se confirmaba que Ed Sheeran participará en la nueva temporada de Juego de Tronos. Sólo había que hacer un pequeño trabajo de investigación, para buscar algunos ejemplos (por supuesto, hay infinidad de nombres que se quedan el en tintero) y el tema estaba servido.
Aunque hay algunas veces en las que no sabemos qué fue antes, el huevo o la gallina. Como Jennifer López o LL Cool J. Por qué ¿qué es exactamente J Lo? ¿Una actriz que canta o una cantante que actúa? (Por favor, ahorraos los trolleos, que ya nos conocemos). El caso es que ahora protagoniza la serie Shades of Blue (Calle 13), una trama policial que lidia con la corrupción, y que, actualmente, se encuentra en su segunda temporada
LL Cool J es polifacético. Además de ser un reconocido rapero, que ha obtenido seis discos de platino consecutivos, presenta Lip Sync Battle (MTV), uno de los programas más divertidos y adictivos de cuantos existen actualmente, y también protagoniza el spin off del spin off: NCIS Los Ángeles (Fox y Cuatro), serie veterana de nuestras pantallas.
Bones (Fox) cuenta en su cast con, no uno, sino dos músicos famosos, además, por su peculiar imagen: Cindy Lauper, con su pelo de colores, y sus ojos prácticamente inexistentes, es una de las voces más representativas de la década de los ochenta, que también ha hecho sus pinitos en el cine y en la televisión. Y el ZZ Top Billy Gibbons, al que nadie reconocería si se cortara la barba y se quitara las gafas de sol.
El otro día os hablaba del drama estrella de esta temporada, This is Us, (Fox Life) renovada, del tirón, para dos temporadas más, cuyo episodio final ha hecho llorar a todo el mundo. Pues Mandy Moore (mamá Rebecca Pearson), ya tenía en su haber varios discos, antes de protagonizar Un Paseo para Recordar, y de participar en series como Scrubs, Anatomía de Grey, Red Band Society (basada en la serie que emocionó a Spielberg), o Cómo Conocí a Vuestra Madre.
Y es que la heredera de Friends, como su antecesora, ha contado con infinidad de personajes invitados, y entre ellos voy a destacar a otro cantante (ya sé lo que vais a decir algunos), y no es otro que nuestro Enrique Iglesias, que repitió papel, de ligón latino, en Dos Hombres y Medio. Y otro latino, que pudimos ver en el episodio más prescindible (no por su culpa) de Glee, fue Ricky Martin, interpretando a un profesor de instituto nocturno, que ganaba un sobresueldo como modelo de dientes. Y a Gloria Estefan, haciendo de madre de una de las protagonistas. Y, precisamente, los autores de Glee, Ryan Murphy y Brad Falchuk (que es el actual novio de Gwyneth Paltrow, a la que conoció en el rodaje de esta serie) son los que nos regalaron a uno de los cantantes más atractivos y tatuados, Adam Levine, en otra de sus series estrella, American Horror Story.
Las nuevas generaciones conocen a Billy Ray Cyrus como padre de Millie, pero, la realidad, es que, como cantante, nadie de mi generación podrá olvidar aquel Achy Breaky Heart, que años más tarde versionaría Coyote Dax (no rompas más, mi pobre corazón). Después fue el protagonista de Doc, una historia que casi nadie recuerda, y que, lo creáis o no, duró cinco temporadas. Luego ya llegó Hannah Montana (la única serie Disney que no he visto, y es que la niña nunca me cayó demasiado bien). Y después, bueno, lo de los premios MTV, la transformación de niña a mujer, y de mujer a bicho raro. Pero eso es otra historia.
Y por hoy lo dejo aquí, pero prometo retomar la historia, con otros músicos, o a lo mejor me decanto por los deportistas… Este tema da mucho juego.
Publicado en Tribuna de Ávila
